Israel prohíbe las actividades de la UNRWA pese a la presión internacional; Netanyahu ofrece «trabajar con socios» para garantizar la ayuda humanitaria

La Knesset de Israel aprobó el lunes por la noche dos leyes: una que prohíbe las actividades de la UNRWA en territorio israelí y otra destinada a restringir significativamente sus operaciones en la Franja de Gaza, así como en Judea y Samaria.

Los proyectos de ley se presentaron en respuesta a las numerosas revelaciones de los últimos meses que indican la existencia de vínculos entre la organización terrorista Hamás y la UNRWA (Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente) tras la supuesta participación de varios de sus miembros en el atentado terrorista masivo del 7 de octubre.

Según cálculos israelíes, alrededor del 10% del personal del UNRWA en Gaza está afiliado a Hamás.

Tras la aprobación de los proyectos de ley, la oficina del Primer Ministro Benjamin Netanyahu (PMO) exigió responsabilidades a cualquier empleado de la UNRWA implicado en terrorismo.

«Dado que evitar una crisis humanitaria es también esencial, la ayuda humanitaria sostenida debe seguir estando disponible en Gaza ahora y en el futuro.

En los 90 días antes de que esta legislación entre en vigor -y después- estamos dispuestos a trabajar con nuestros socios internacionales para garantizar que Israel siga facilitando ayuda humanitaria a los civiles en Gaza de una manera que no amenace la seguridad de Israel», declaró la PMO.

El anuncio de última hora de la noche también pretendía aliviar la amplia reacción internacional contra las leyes, que suscitaron duras críticas por parte de Estados Unidos, las Naciones Unidas y varios diplomáticos occidentales.

La administración Biden ejerció una fuerte presión sobre Israel para que detuviera la legislación con antelación, mientras que los gobiernos de Canadá, Australia, Francia, Alemania, Japón, Corea del Sur y Reino Unido emitieron el lunes una declaración conjunta instando a Israel a suspender los proyectos de ley.

«Instamos al gobierno israelí a que detenga la aplicación (...) si la UNRWA no existe, los civiles, incluidos niños y bebés, no recibirán los alimentos que necesitan y esto es para nosotros inaceptable», declaró el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller.

Diplomáticos de Alemania, España y el Reino Unido criticaron inmediatamente los proyectos de ley, mientras que el jefe de la UNRWA, Philippe Lazzarini, calificó la medida de «precedente peligroso» que sólo «profundizará el sufrimiento de los palestinos.»

El primer proyecto de ley prohíbe cualquier operación de la UNRWA en el territorio soberano de Israel, incluido Jerusalén Este, donde la agencia opera un gran complejo.

«Israel tiene el pleno y absoluto derecho de actuar contra la UNRWA tras el fracaso de la comunidad internacional», subrayó la miembro de la Knesset Sharren Haskel (partido Unidad Nacional), copatrocinadora del proyecto de ley.

«No hay ningún país en el mundo en el que los empleados de una organización internacional participen en la masacre de sus ciudadanos y la organización siga existiendo en su suelo ni siquiera un día más».

«Esta es una llamada a la justicia, una llamada de atención que establece una clara línea roja: cualquiera que se atreva a ayudar al terrorismo y se comporte como un terrorista no tiene derecho a existir en el Estado de Israel», dijo el miembro de la Knesset Boaz Bismuth (Likud), otro de los copatrocinadores del proyecto de ley.

El segundo proyecto de ley ordena que Israel rompa todos los lazos con la UNRWA, incluida la suspensión de la expedición de visados de entrada para sus trabajadores en Judea y Samaria (Cisjordania) y la Franja de Gaza.

El presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores y Seguridad, Yuli Edelstein, explicó el razonamiento de las leyes al comienzo del debate en el pleno.

«Como parte de las deliberaciones de la comisión sobre la ley, se mostró un vídeo que probaba la implicación de personal de la UNRWA en el secuestro de un cadáver en la Franja de Gaza y otras pruebas de su actividad en Hamás y la Yihad Islámica en Gaza».

«Así como el hecho de que la persona que comandó la masacre en el refugio de Re'im, en la que 16 israelíes fueron asesinados y cuatro de ellos secuestrados a Gaza, era un terrorista de la UNRWA. A la luz de estos antecedentes, y puesto que está probado para el Estado de Israel que la UNRWA y sus empleados actuaron contra el Estado de Israel, el Estado debe determinar que se ponga fin a las actividades de la UNRWA en su territorio», dijo Edelstein.