Un ex comandante iraní -ahora creyente en Jesús- se dirige a los miembros de la Knesset: 'Estoy aquí, apoyando a Israel'

Pocos días antes de que las calles de Teherán se llenaran de gente declarando «¡Muerte a Israel! Muerte a América!« para conmemorar el aniversario de la revolución islámica, un iraní de esa misma ciudad se puso de pie para dirigirse a la Knesset en Israel con un mensaje exactamente opuesto.

Hace muchos años, Kurosh Azadmehr (nombre ficticio por motivos de seguridad) era comandante del ejército iraní, pero ahora es pastor de una iglesia en Europa.

Azadmehr dijo a los miembros de la Knesset: «Fui entrenado por el régimen, me lavaron completamente el cerebro, fui comandante... pero un día, le oré al Dios de Israel, “muéstrame la verdad”. Él vino a mí, el Dios de Israel, Yeshua el Mashiaj [Jesús el Mesías], Él me cambió por completo. Ahora estoy aquí, junto a Israel con un gran corazón, llorando y apoyándote hasta el final. Los quiero tanto con todo mi corazón. Esto es muy valioso para mí».

Azadmehr y su familia vivieron previamente en Israel durante cinco años, donde se desarrolló su comprensión de las raíces judías de la fe cristiana y creció su amor por el pueblo.

En su iglesia de Europa, Azadmehr dirige ahora a su congregación para que aprecie las fiestas señaladas de Israel según la Biblia, y también enseña en lengua farsi a un grupo de iraníes que, como él, tuvieron que huir de su patria.

«No puedo ir a visitar a mi familia, a mi pueblo, y lo siento mucho, muchísimo», les dijo a los miembros de la Knesset.

Él también expresó que lamenta las maldiciones que los iraníes han hecho llover sobre Israel. Sin embargo, Él se mantiene inquebrantable en sus convicciones sobre el Estado judío.

Azadmehr formó parte de un viaje organizado por la Embajada Cristiana Internacional de Jerusalén (ICEJ) que tomó a los participantes al lugar de la fiesta de Nova, a la frontera norte y a la Knesset.

Hablando de su estadía, Él dijo: «Fue un viaje que me abrió los ojos ya que era mi primera vez en la tierra después del 7 de octubre. Sentí la pesadez de la tristeza por lo ocurrido, pero vi destellos de esperanza cuando abrazamos a los soldados y les tendimos la mano de la reconciliación».

El grupo también visitó una congregación judía mesiánica en el Monte Carmelo, cerca de Haifa. Azadmehr fue invitado a compartir en el servicio, y dijo,

«La reconciliación es muy importante. Mi país lleva 46 años bajo una gran maldición porque nosotros, durante 46 años, hemos maldecido esta tierra. Quiero decirles a todos ustedes, en nombre de mi pueblo en Irán, en nombre de mi malvado régimen en Irán, en nombre de mi familia, quiero decirles, pueblo judío, perdónenme, reconciliación, perdónenme, quiero devolver la bendición a mi país. ¡Basta de maldiciones! ¡Basta ya! Por favor, perdonadme. Los quiero mucho».

Azadmehr, al igual que John Ghanim de Yemen, cree que la cultura de maldecir a Israel que es endémica en su patria ha cobrado a cambio la maldición del país, como advierte la Biblia en Génesis 12:3.

Tanto Azadmehr como Ghanim se dedican ahora a animar a sus compatriotas a bendecir a Israel en lugar de pronunciar maldiciones, con el fin de traer la restauración y un futuro mejor para Irán y Yemen.

Azadmehr terminó su breve discurso ante la Asamblea del Carmelo pronunciando la bendición sacerdotal de Números 6:24-26 y pronunciando la paz sobre la gente reunida, primero en hebreo, luego en inglés y después en lengua farsi:

«El Señor te bendiga y te guarde; el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti y tenga misericordia de ti; el Señor vuelva su rostro hacia ti y te dé la paz».