La coalición liderada por Estados Unidos lanza decenas de ataques aéreos contra posiciones Houthis en Yemen

Una coalición internacional liderada por Estados Unidos lanzó en la madrugada del viernes decenas de ataques aéreos y con misiles contra objetivos de los rebeldes houthis en Yemen.

Los ataques fueron llevados a cabo por fuerzas estadounidenses y británicas con el apoyo de Australia, Canadá, Países Bajos y Bahréin.

Según el Mando Central de Estados Unidos, el objetivo era "degradar su capacidad para continuar sus ataques ilegales y temerarios contra buques y embarcaciones comerciales estadounidenses e internacionales en el Mar Rojo."

On Jan. 11 at 2:30 a.m. (Sanaa time), U.S. Central Command forces, in coordination with the United Kingdom, and support from Australia, Canada, the Netherlands, and Bahrain conducted joint strikes on Houthi targets to degrade their capability to continue their illegal and… pic.twitter.com/bR8biMolSx

— U.S. Central Command (@CENTCOM) January 12, 2024

Tras la brutal invasión de Israel por Hamás el 7 de octubre, los rebeldes Houthis declararon su apoyo al grupo terrorista y lanzaron numerosos ataques contra Israel y los buques que atraviesan el estrecho de Bab el-Mandeb.

"Estos ataques selectivos son un claro mensaje que Estados Unidos y nuestros socios no tolerarán ataques contra nuestro personal ni permitirán que actores hostiles pongan en peligro la libertad de navegación en una de las rutas comerciales más críticas del mundo", declaró el presidente Biden en un comunicado.

"No dudaré en dirigir nuevas medidas para proteger a nuestra gente y el libre flujo del comercio internacional según sea necesario".

El primer ministro británico, Rishi Sunak, dijo que la Real Fuerza Aérea británica participó en los ataques porque "el Reino Unido siempre defenderá la libertad de navegación y el libre flujo del comercio."

"Los primeros indicios apuntan a que la capacidad de los Houthis para amenazar la navegación mercante... ha recibido un golpe", dijo el Ministerio de Defensa del Reino Unido. Según el CENTCOM, los ataques tuvieron como objetivo sistemas de radar, sistemas de defensa aérea y lugares de almacenamiento y lanzamiento de drones, misiles de crucero y misiles balísticos.

Los ataques aéreos y con misiles fueron llevados a cabo por partes de las considerables fuerzas estadounidenses estacionadas en las proximidades del Mar Rojo desde el comienzo de la guerra entre Israel y el grupo terrorista Hamás.

Entre ellas había un submarino, varios destructores y cazas a reacción, y parte del grupo de ataque del portaaviones USS Dwight D. Eisenhower, según informó un funcionario de defensa estadounidense al Wall Street Journal (WSJ).

Un portavoz de los rebeldes Houthi dijo al canal Al Jazeera que había muertos y heridos como consecuencia de los bombardeos y que estaban trabajando para verificar el número de víctimas.

Los rebeldes Houthi protestaron enérgicamente contra los ataques y afirmaron haber lanzado ataques de represalia contra las fuerzas de la coalición.

"Se trata de una agresión brutal", declaró al WSJ Nasr al-Din Amir, un responsable houthi. "Sin duda pagarán su precio, y no vacilaremos en nuestra postura de apoyo al pueblo palestino, cueste lo que cueste".

A pesar de las amenazas, Estados Unidos no tenía información sobre ningún ataque contra sus fuerzas o las de los miembros de la coalición en la zona, dijo a la prensa un alto cargo militar.

"Responsabilizamos a los militantes Houthi y a sus patrocinadores iraníes desestabilizadores de los ataques ilegales, indiscriminados y temerarios contra la navegación internacional que han afectado a 55 naciones hasta el momento, incluso poner en peligro la vida de cientos de marineros, incluyendo a los estadounidenses", dijo el comandante del CENTCOM, el general Michael Erik Kurilla.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Nasser Kanaani, "condenó enérgicamente" los ataques y añadió: "Lo consideramos una clara violación de la soberanía y la integridad territorial de Yemen, y una violación de las leyes, normas y derechos internacionales."

El grupo terrorista libanés Hezbolá, que al igual que los Houthis es otra fuerza proxy iraní en la región, también calificó los ataques contra Yemen de "agresión estadounidense" y acusó a Estados Unidos de ser "socio de pleno derecho de las masacres... llevadas a cabo por el enemigo sionista."

El Ministerio de Asuntos Exteriores saudí declaró que seguía los acontecimientos "con gran preocupación" e hizo un llamamiento para desescalar la situación.