Los seis rehenes israelíes encontrados en Agosto fueron ejecutados por Hamás y no murieron directamente en un ataque aéreo, según una investigación de las FDI.

El ejército israelí reveló el miércoles los resultados de una investigación exhaustiva sobre la muerte de seis rehenes cuyos cadáveres fueron recuperados en la Franja de Gaza en Agosto.

Las FDI comunicaron a las familias de los rehenes que fueron abatidos por terroristas de Hamás que temían una inminente incursión de las FDI y no directamente por bombardeos israelíes, como había afirmado la organización terrorista Hamás.

Los cadáveres de Alex Dancyg (75), Yagev Buchshtab (35), Chaim Peri (79), Yoram Metzger (80), Nadav Popplewell (51) y Avraham Munder (78) fueron recuperados por las tropas israelíes de un túnel de Khan Yunis en una incursión nocturna el 20 de agosto.

De los seis rehenes, sólo Munder no había sido declarado muerto por las FDI en ese momento. Información de inteligencia llevó a los militares a declarar muertos a Peri, Metzger y Popplewell en junio, mientras que Dancyg y Buchshtab fueron confirmados muertos por las FDI a finales de julio.

En un principio, las FDI no pudieron determinar las circunstancias exactas de sus muertes.

El miércoles, la Radio del Ejército informó de que la investigación había revelado que, durante los primeros meses de la guerra, los rehenes estuvieron retenidos en un gran túnel apodado «el reino» bajo Khan Yunis, probablemente junto a otros rehenes y altos cargos de Hamás.

Las FDI creen que estuvieron retenidos allí hasta finales de diciembre o principios de enero. Durante ese tiempo, la inteligencia militar tuvo conocimiento de la presencia de los rehenes en el túnel del «reino».

Sin embargo, los seis rehenes fueron trasladados después a un túnel situado en el barrio de Hamad City, a unos 4 km de distancia, para mantenerse alejado de la ofensiva terrestre de las FDI en Khan Younis.

El ejército aún no sabe si los rehenes fueron trasladados allí por encima o por debajo de la tierra. En ese momento, las FDI habían perdido el contacto con ellos y desconocían su nueva ubicación.

El segundo túnel no estaba pensado para una estancia larga, sino que se construyó como túnel de tránsito, muy estrecho y de tamaño similar al túnel donde fueron asesinados otros seis rehenes en el barrio de Tel Sultan, en Rafah.

El 14 de febrero, la Fuerza Aérea Israelí (IAF) bombardeó objetivos en la ciudad de Hamad, muy cerca de la ubicación del entonces desconocido túnel. El ejército aclaró que no había sospechas de que hubiera rehenes cerca de los objetivos en el momento de los ataques de la IAF.

Según la investigación, los ataques aéreos no se debieron a falta de juicio o cuidado, habían recibido todas las aprobaciones necesarias y se llevaron a cabo de acuerdo con los procedimientos y órdenes establecidos.

«No siempre sabemos dónde están todos los secuestrados, pero hacemos un esfuerzo diario para minimizar cualquier riesgo. Hubo varios casos durante la guerra en los que nuestra falta de conocimiento, por desgracia, condujo directa o indirectamente a la muerte de rehenes», declaró un alto cargo de seguridad a Radio Ejército.

Como consecuencia de los ataques aéreos, se cortó el suministro de oxígeno y aire en el túnel, lo que provocó la formación de gases tóxicos que probablemente mataron tanto a los rehenes como a sus captores.

El ejército estima que los terroristas ejecutaron a los rehenes inmediatamente después del ataque aéreo, probablemente temiendo una incursión inminente de las FDI. Sin embargo, las fuerzas israelíes no llegaron al túnel hasta agosto, cuando descubrieron los cadáveres de las víctimas con heridas de bala.

Junto a ellas, se encontraron los cadáveres de seis terroristas de Hamás. Las FDI calculan que en los seis meses transcurridos entre febrero y agosto, otros terroristas de Hamás entraron en el mismo túnel, pero no trasladaron los cadáveres a otro lugar, creyendo que las FDI no encontrarían el túnel.