«O no hay drones o no hay Hezbolá»: el ministro de Defensa israelí Katz intensifica las amenazas mientras el frente libanés se calienta de nuevo

El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, intensificó sus amenazas a Líbano el domingo, después que Hezbolá intentara lanzar varios drones en los últimos días, lo que provocó que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) llevaran a cabo ataques en el interior de Líbano.

Durante una visita a algunas de las posiciones restantes de las FDI en el sur de Líbano, Katz declaró: «Quiero enviar un mensaje claro desde aquí a Hezbolá y al gobierno libanés: Israel no aceptará el lanzamiento de drones desde Líbano».

El jueves pasado, las FDI interceptaron un dron de reconocimiento de Hezbolá por primera vez desde que el alto al fuego. Al día siguiente, las FDI derribaron otro «objetivo aéreo sospechoso» cerca de Zarit, en la Alta Galilea.

«No permitiremos que se repita la situación del 7 de octubre. Frustaremos las amenazas y responderemos con toda nuestra fuerza. O no habrá drones o no habrá Hezbolá», advirtió Katz.

«Sugiero que el sucesor del sucesor de Nasrallah no se equivoque sobre la determinación de Israel como lo hicieron sus predecesores, no sea que pague un precio muy alto».

En el lapso de una semana, a finales de septiembre y principios de octubre de 2024, Israel eliminó al líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, y a su sucesor, Hashem Safi al-Din. Hezbolá anunció el domingo que Nasrallah sería enterrado el 23 de febrero.

Katz dijo que su visita al sur del Líbano tenía como objetivo supervisar la aplicación del acuerdo de alto al fuego. El acuerdo original preveía que la retirada de las fuerzas israelíes se completara antes del 26 de enero.

Sin embargo, Estados Unidos anunció una prórroga del plazo hasta el 18 de febrero después que Israel declarara que no completaría la retirada debido al lento despliegue de las Fuerzas Armadas Libanesas (LAF) y a las continuas violaciones por parte de Hezbolá.

El miércoles pasado, la Fuerza Aérea Israelí (FAI) atacó un vehículo de ingeniería en el sur del Líbano que «se utilizaba para intentar restaurar la infraestructura terrorista».

Tras interceptar dos drones, las FDI anunciaron el viernes por la mañana que habían atacado varios objetivos de Hezbolá en el valle de Bekaa, uno de los principales bastiones de Hezbolá en el interior del Líbano, que fue atacado repetidamente por Israel durante la guerra.

«Entre los objetivos atacados: un emplazamiento militar con infraestructura subterránea para el desarrollo y la producción de armas, e infraestructura de tránsito en la frontera entre Siria y el Líbano a través de la cual el grupo terrorista Hezbolá está tratando de transferir armas», declaró el ejército israelí.

El domingo por la mañana, el portavoz árabe de las FDI, el coronel Avichay Adraee, reiteró las advertencias a los residentes del sur del Líbano para que no se acercaran a las posiciones de las FDI.

«Como saben, las FDI se han redesplegado recientemente en varios lugares del sur del Líbano, de acuerdo con el acuerdo de alto el fuego, con el objetivo de permitir gradualmente el despliegue efectivo del ejército libanés y desmantelar y expulsar a Hezbolá», declaró Adraee.

«Les recuerdo que el período del acuerdo se ha ampliado y las fuerzas de las FDI siguen desplegadas sobre el terreno... Les pedimos que esperen y no permitan que Hezbolá vuelva a aprovecharse de ustedes», escribió en Twitter.

A pesar de los llamamientos de las FDI, hubo varios informes de «marchas de retorno» en diferentes pueblos del sur del Líbano, con cientos de personas ondeando de nuevo banderas de Hezbolá y acercándose a posiciones controladas por Israel mientras coreaban consignas.

Los medios de comunicación libaneses informaron de que los soldados israelíes abrieron fuego contra civiles. Otros informes afirmaron que las FDI detuvieron a un pescador frente a la costa libanesa, cerca de An-Naqura, próxima a la frontera israelí. Las FDI no hicieron comentarios sobre las acusaciones.